La televisión ha sido uno de los inventos más placenteros y geniales de todos los tiempos, o al menos así lo es para la mayoría de las personas. Desde la aparición  del televisor blanco y negro hasta el televisor ultra HD de hoy en día, han sido muchos los cambios en este dinámico aparato, el cual ha  logrado captar la atención y el interés de un sin número de  personas en todo el mundo.

Ahora bien, se dice que no está muy claro quién inventó este novedoso aparato, y en tal sentido, se da por hecho que las primeras imágenes televisadas se produjeron en los años 1920 y que los primeros televisores se fabricaron para los años 1930. Estos tenían limitaciones de calidad de imagen, tamaño y color. Con el paso de los años y de acuerdo  a los avances tecnológicos y científicos, los televisores fueron evolucionando a un ritmo vertiginoso.

Inicialmente los televisores en blanco y negro estaban compuestos por tubos electrónicos de cámara inventados por Ferdinand Braun en 1887, (muchos años antes de inventarse el primer televisor) o por un disco Nipkow, una pieza fundamental de la televisión diseñado por el escocés John Logie Baird, perfeccionado en 1923. Estos elementos dieron lugar al  desarrollo de la válvula de filamento, y por consiguiente al primer radio- receptor totalmente electrónico y posteriormente a la televisión electromagnética, lo que permitió la transmisión por líneas telefónicas y  líneas móviles utilizándose por primera vez cables coaxiales que  determinaron  los estándares para la implementación del ancho de banda para la televisión.

Televisor con disco Nipkow

 

Aunque Braun y Logie aportaron piezas únicas para su funcionamiento, quien verdaderamente impactó al mundo fue González Camarena, en 1940  al inventar la televisión a color, gracias a su sistema Tricromático Secuencial de Campos visión en color, el cual en un principio se usó con fines científicos.  A finales de la década de los 40 la televisión electrónica y a color sustituye completamente a la mecánica y En 1950 aparece el primer televisor a color, el CT-100, con pantalla de 15 pulgadas, haciendo posible la  teledifusión en color.

Luego en 1960, se introduce la primera pantalla rectangular de TV y posteriormente sale a la venta el primer televisor transistorizado  operado por  baterías (Safari de Philco).  Hacia el años 1985 se comercializan los primeros televisores a color de 35 pulgadas y empiezan  los primeros pasos hacia la digitalización.   

Para 1990, se inicia en EE.UU. la producción de televisores de pantalla gigante (más de 27 pulgadas). Con (subtitulado electrónico) convirtiéndolos en un  estándar de servicio para personas con problemas auditivos en la emisión de programas de televisión y videos. Ya para 1995 se introduce la pantalla plana de plasma para TV, definiendo el formato de alta definición (HD).

A partir del año 2000 los televisores se hacen modernos, livianos, fáciles de trasladar, de mayor calidad, accesibles al bolsillo del consumidor; convirtiéndolos en un uno de los electrodomésticos  más populares y aceptados en todo el mundo. Hoy en día, los modelos más comunes y funcionales  son  los 3D, pantallas de cristal liquido, táctiles y con sensores de movimientos.

Es normal que en cada hogar exista al menos un aparato de televisión, estos constituyen una fuente de entretenimiento y de unión familiar, en muchos casos permiten al telespectador interactuar, relajarse, expresar sus emociones (reír, llorar, enojarse), aprender, educarse, actuar  y hasta soñar.